Ciudad de México. El cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), cuyo líder José Antonio Yépez Ortiz fue detenido este domingo, mantiene desde 2017 una disputa con el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) por el control territorial de la zona del Bajío.
En ese año, El Marro difundió en redes sociales un video declarando la guerra al CJNG, por la hegemonía del “triángulo de las Bermudas”, un territorio comprendido entre los vértices que forman las ciudades de Guanajuato, León y Los Apaseos.
Lo que comenzó por una disputa por el negocio del huachicol, se extendió a otras actividades ilícitas, como el secuestro, la extorsión y el narcotráfico, lo cual colocó a Guanajuato como el estado con más crímenes violentos en el país.
Según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a junio pasados se registraron en el estado 2 mil 295 víctimas de homicidio doloso.
En entrevista con La Jornada, a principios del mes pasado, el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, subrayó la relevancia de esta disputa entre el CSRL y el CJNG, por el control de territorio: “Ha habido un crecimiento de la cantidad de personas que están no solamente en el narcotráfico, sino que prácticamente están teniendo ya el control de la vida cotidiana en ciertas regiones del país.”