El cantante reconoció que durante la pandemia tuvo la oportunidad de unirse a sus hijos y crear una relación excepcional
Después de pasar el aislamiento por la contingencia del Covid-19 en Puerto Vallarta, al lado de sus cinco hijos, Alejandro Fernández comienza poco a poco a retomar su agenda laboral. Después de su primer vuelo transnacional a España donde lo vimos muy divertidos al lado de Carlos Rivera y Sebastián Yatra, el cantante regresó a nuestro país donde concedió una entrevista a Anette Cuburu para el programa Venga la Alegría donde habló, como nunca, de las grandes lecciones que le dejó la pandemia y de cómo ha cambiado su vida tras las bodas de sus hijos, Camila y Alejandro; además de la llegada de su nieta Cayetana a quien describió como la mujer de su vida.
Con una imagen renovada que delata que está pasando por un gran momento, el cantante reconoció que se ve bien, porque se siente muy bien: “De las buenas cosas que pasaron en la post pandemia fue haber retomado y centrarte en la vida, tomarte más espacios para estar con la familia, retomé el ejercicio, empecé a hacer nuevo y buenos hábitos”. El Potrillo reveló cómo fue que, con la pandemia tuvo que hacer un alto total: “Yo tenía una carga de trabajo súper fuerte, muy dura, todos los años trabajaba 70-60 fechas al año, prácticamente, todos los fines de semana. Al principio, me dio muchísima ansiedad, después me relajé y empecé a disfrutar muchísimo de la vida, de poder estar más tiempo con mi familia, con mis hijos y ahora con mi nieta, entonces, sacamos cosas muy buenas”, explicó.
Alejandro reconoció que esta situación lo hizo acercarse a sus cinco hijos, con quienes tuvo la oportunidad de vivir el aislamiento, un tiempo al que le sacaron mucho provecho: “Me he acercado más, sobre todo con mis hijos, porque sentía que, de repente, cada quien ya había tomado su rumbo, sus vidas y no nos habíamos dado cuenta de que a veces pasa dos meses sin verlos. Cuando empezó el aislamiento, nos encerramos, y era 24/7, todo el día. Me tocó pasarlo en la playa, me acababan de entregar mi casa de Puerto Vallarta y ahí fue donde nos refugiamos”, recordó el cantante quien, después del confinamiento, entregó a dos de sus hijos en el altar.
Fue el primero de agosto del año pasado, cuando Camila Fernández, hija del cantante, se casó con Francisco Barba, con quien, en marzo pasado, debutó como mamá con la llegada de Cayetana. Además, en mayo, Alex Fernández, primogénito de El Portillo, se casó por el civil con Alexia Hernández. Sobre estos acontecimientos, el cantante, reflexionó: “Es inevitable, no puedes detener el tiempo”. Reconoció que los enlaces de sus hijos y el nacimiento de su nieta han sido situaciones que ocurrieron para llenar de felicidad a la familia: “Cuando (Camila) vino y me lo dijo (que estaba embarazada), al verla feliz y realizada dije: ‘si ella está bien, yo también’. Son regalos que te da la vida”, explicó.
¿Cómo es su mujer ideal?
Aunque reconoció que, en este momento, su nieta Cayetana es la única mujer que acapara toda su atención -“Se parece muchísimo a Camila y Camila es muy parecida a mí, está increíble, es maravillosa. Me tiene extasiado. La mujer de mi vida, literal”-, el cantante también reconoció que sí le gustaría volverse a enamorar y tiene muy claro cómo debe ser esa persona que robe su corazón: “Quiero tener una compañera, una persona que me ayude en la vida, que siempre me apoye y me ayude a crecer, tanto en lo profesional, como en lo espiritual”, finalizó el cantante quien reconoció que es muy feliz.
Fuente: Hola México