Santa María del Oro es un pueblo y municipio de la Región Sureste del estado de Jalisco, cercano a Michoacán, que recientemente ha sido reconocido a nivel nacional por ser objeto de ataques por parte del Cártel Nueva Generación (CNG), aunque la ola de violencia que azota a la zona no es nueva.
En enero de este año, personal militar fue víctima de la explosión de minas antipersonales, colocadas en un camino de terracería de Santa María del Oro.
El saldo en esa ocasión fue de un soldado muerto y seis más lesionados, hechos registrados en videos grabados por las cámaras de un vehículo oficial de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Además de ese hecho criminal, esa organización delictiva también perpetró diferentes ataques en contra de los habitantes y de las fuerzas armadas, en las que utilizaron fusiles de asalto, drones cargados de explosivos y ametralladoras.
Emboscadas al Ejército mexicano
En abril, un nuevo enfrentamiento entre miembros del Cártel Nueva Generación y el Ejército mexicano se registró en el sureste de Jalisco, sin que se lamenten pérdidas humanas, pero sí con lesionados como resultado del encuentro violento.
Integrantes de un grupo armado del grupo criminal emboscó a personal del Ejército Mexicano, en la localidad de La Higuerilla, del municipio de Santa María del Oro.
El reporte preliminar indica que, en el ataque, tres militares resultaron heridos, por lo que luego de ser atendidos por sus compañeros, quedaron en espera de apoyo aéreo, para ser trasladados en helicóptero a un hospital de la región.
La ofensiva criminal fue perpetrada desde diferentes puntos de esa zona de Jalisco, colindante con el estado de Michoacán. Los informes indican que el CNG atacó a las fuerzas armadas con rifles de alto poder, fusiles de asalto Barrett calibre .50, con drones cargados de explosivos y con ametralladoras Minigun. Hasta este momento no ha sido oficializado el saldo total de esa agresión al personal militar y el estado de salud de los oficiales lesionados.
Al menos 10 localidades del municipio de Santa María del Oro, Jalisco, pidieron apoyo al Gobierno federal. Ello, para que amplíe la presencia militar en sus comunidades, ya que fueron objeto de ataques del Cártel Nueva Generación.
Los pobladores de El Vallecillo, Las Higueras, Santa Rosa, Higuerillas, San Vicente, La Taberna y La Soledad, entre otras, fueron desplazados recientemente por el CNG.
Desplazan a familias de Santa María del Oro
El pasado 26 de julio, integrantes de un grupo fuertemente armado del Cártel Nueva Generación atacó y desplazó a decenas de familias de varias localidades del municipio de Santa María del Oro, Jalisco y de Los Reyes, Michoacán.
Estas acciones se dieron en el marco de que el Gobierno federal diera la orden de retirar las bases del Ejército Mexicano, que resguardaban esa zona limítrofe de ambas entidades.
Entre las localidades, que ya son pueblos fantasmas por la ofensiva criminal del CNG, se encuentran: El Santuario, Los Desmontes, El Sauz, Santa Rosa, La Taberna, La Soledad y Zipoco, en las que los habitantes han tenido que huir, para no ser asesinados.
Las víctimas informaron que la organización criminal perpetró ataques con drones cargados de explosivos y con gente armada con fusiles de asalto, para apoderarse de sus comunidades.
Se repiten ataques en agosto
El 3 de agosto, El Universal dio a conocer que decenas de hombres fuertemente armados al servicio del mismo cártel irrumpieron en otras localidades del municipio de Santa María del Oro, Jalisco, ubicadas en los límites con el estado de Michoacán, alertaron los habitantes.
Pobladores de Tocumbo, Tingüindín y Cotija, Michoacán, denunciaron que esa movilización crece a pasos agigantados y están a pocos días de llegar a sus municipios.
