Los expertos en salud pública y enfermedades infecciosas advierten que este otoño Estados Unidos necesita aumentar sustancialmente su tasa de vacunación contra la influenza para mitigar una confluencia potencialmente mortal de influenza estacional con una segunda ola anticipada de COVID-19.
«Cuando se produzca una colisión de estas dos enfermedades al mismo tiempo, creo que tendremos problemas reales», señaló a la Dra. Rochelle Walensky, jefa de la división de enfermedades infecciosas del Massachusetts General Hospital en Boston, Estados Unidos.
La Dra. Walensky señaló que alrededor de 45% a 50% de las personas se vacunan contra la influenza en cualquier temporada. Y aunque también se necesita una vacuna contra la COVID-19, es muy necesaria una mayor tasa de vacunación contra la influenza. «Necesitamos realizar una campaña de vacunación masiva porque es algo que podemos hacer en términos de prevención».
Una alta cobertura de la vacuna reduciría la mortalidad relacionada con la influenza, al tiempo que ayudaría a preservar la capacidad y la función del sistema de salud durante la circulación de los virus de la influenza y la COVID-19.
«El estrés en los hospitales será mayor si la COVID-19 y las epidemias de influenza se superponen y alcanzan su punto máximo al mismo tiempo».
«Todavía no tenemos una vacuna contra la COVID-19, pero hay vacunas seguras y moderadamente efectivas disponibles contra la influenza. Su uso generalizado es importante ahora más que nunca y alentamos a los proveedores de atención médica, empleadores y líderes comunitarios a promover la vacunación»,