Los próximos tres o cuatro meses serán complicados, es probable que los integrantes de muchas familias aguascalentenses se queden sin empleo, lo cual tendrá efectos en la economía local: va a incrementar la informalidad, acelerará la precarización laboral e incluso podría detonar la migración.
Jael Pérez Sánchez, vicepresidente de la Federación de Colegios de Economistas, consideró que los obreros que sean despedidos podrían refugiarse en el mercado informal, o tendrán que emplearse en otros sectores donde probablemente verán disminuidos ingresos, quizá otros migren a estados vecinos, o en el caso de los profesionistas a Canadá; “son jóvenes que podríamos aprovechar por conocimiento, y que se nos están yendo”.
Dijo que un problema es que son personas que difícilmente podrán ser contratadas en otro sector, pues varios de ellos se han especializado en las empresas manufactureras y no tienen experiencia en otros rubros, por lo cual se les dificultará encontrar empleo en Aguascalientes con una industria automotriz en crisis.
Jael Pérez subrayó que el gobierno saliente y entrante deben ponerse de acuerdo para ver cómo van a hacer frente a esta situación, que cayó justo en el periodo de transición y que tendrá efectos económicos, como una caída en el consumo; añadió que desde hace años varios especialistas advirtieron que era urgente el tema de la diversificación económica en Aguascalientes.
En el discurso se planteó que se estaba viendo la diversificación económica, pero en los hechos, cuando revisamos el valor agregado de Aguascalientes, pues nos damos cuenta que sigue dependiendo altamente del sector automotriz.
Jael Pérez Sánchez, Vicepresidente de la Federación de Colegios de Economistas
Finalmente, el vicepresidente de la Federación de Colegios de Economistas, apuntó que una dependencia productiva brinda fortaleza cuando un sector como el automotriz se encuentra en un buen momento, o puede ser muy endeble; añadió que esta será un proceso transitorio, pero no de corto plazo, pues podría extenderse por otro año.