La instalación del centro de datos de Microsoft avanza en la entidad, debido a que está en curso la edificación del complejo tecnológico, pero también está en desarrollo el proyecto comunitario que la firma gestiona de la mano con ONU-Habitat.
El presidente del Vórtice IT, Clúster de Tecnologías de la Información de Querétaro, Jorge Buitrón Arriola, explicó que la construcción lleva aproximadamente cinco meses, en torno al Aeropuerto Internacional de Querétaro (AIQ), entre Colón y El Marqués.
“Ya está operando la construcción (…) le llaman territorio inteligente (…) La construcción del centro de datos es como si fuera una planta de autos, pero tiene que ver con los servidores, con energía, muy sofisticado, está en construcción”, expuso.
En paralelo, destacó, también se estudian los requerimientos de capital humano que tendrá este centro de datos, entre ellos especialistas en ciberseguridad.
De igual manera, está en desarrollo el proyecto de impacto a la comunidad que Microsoft trabaja con ONU-Habitat, denominado Planeación para una mejor calidad de vida en las comunidades de centros de datos.
De acuerdo con la ONU, el objetivo es promover recomendaciones y crear un plan de acción multisectorial, para que las comunidades cercanas a donde se construyen los centros de datos de la compañía avancen en el sentido de la sostenibilidad, de manera inclusiva y resiliente en el marco del desarrollo industrial emergente de la región.
El presidente de Vórtice IT explicó que el clúster también colabora en esta iniciativa, con el objetivo de impactar en las comunidades que están a 20 kilómetros alrededor de la instalación del centro de datos.
“(Participan) en la planeación del impacto y las acciones que van a llevar a cabo, desde ONU y Microsoft, para el beneficio de estas comunidades (…) Por ejemplo, capacitación, que tengan mejor calidad de vida, en cuanto a ciclovías, en cuanto a universidades. Hicimos muchos ejercicios, es más fuimos hasta a las comunidades, para saber qué les duele a las personas que están ahí y cómo verían la llegada de un centro de datos”, explicó.
Este tipo de proyecto ya se implementó en dos localidades de Suecia (Gävle y Sandviken); para el caso mexicano, ONU-Habitat lo adaptó al contexto local, así como a las condiciones derivadas de la pandemia, a través de ejercicios realizados de forma virtual.
De acuerdo con ONU-Habitat, en la primera fase se realizó una investigación y un análisis del territorio con base en información geoestadística.
Asimismo, se realizaron entrevistas preliminares con actores estratégicos de diversos sectores; los resultados han permitido identificar los retos y oportunidades en el área del corredor tecnológico-industrial de Querétaro, respecto a diferentes temáticas como economía, educación, vivienda y medioambiente.
Por tanto, se trabaja con actores locales para diseñar futuros posibles que permitan abordar de forma sistémica las necesidades de las comunidades y el territorio; mediante el trabajo colectivo, se establecen acciones necesarias para alcanzar el escenario ideal, las cuáles se verán reflejadas en las recomendaciones y en un plan de acción.
