En la actualidad, contamos con una amplia variedad de dietas y enfoques nutricionales disponibles para todas las personas, desde contar calorías y macros, hasta excluir ciertos grupos de alimentos o seguir planes adaptados a nuestras necesidades y metas.
Sin embargo, estas dietas tradicionales suelen ser estrictas y poco adaptables. Por ese motivo, la dieta 80/20, se presenta como una buena opción, que ofrece un enfoque más flexible y equilibrado.
¿En que consiste la dieta 80/20?
Esta dieta se basa en consumir alimentos saludables y nutritivos la mayor parte del tiempo, aproximadamente el 80% de la semana, permitiéndose «gustitos» ocasionales en el 20% restante, como por ejemplo comida rápida o alimentos procesados.
Para algunos, seguir esta regla significa mantener una alimentación saludable durante la semana y disfrutar de comida procesada los fines de semana.
Mientras que otros prefieren permitirse pequeños caprichos cada cierto día. Debido a su naturaleza adaptable, cada individuo puede interpretar este concepto según sus necesidades y preferencias personales.
¿Cuáles son los beneficios de esta dieta?
Realista y flexible: esta dieta no implica eliminar grupos de alimentos ni utilizar ingredientes difíciles de encontrar para elaborar recetas complicadas. Esta flexibilidad la hace más realista y fácil de mantener a largo plazo.
Libertad de elección: al no tener reglas estrictas, la dieta 80/20 ofrece libertad para disfrutar de una variedad de alimentos sin sentirse restringido. Esto permite adaptarse mejor a diferentes estilos de vida y preferencias culinarias.
Compatible con alergias e intolerancias: la dieta es adecuada para personas con alergias alimentarias o intolerancias, ya que no requiere eliminar grupos enteros de alimentos de manera permanente. Se pueden hacer ajustes y adaptaciones según las necesidades individuales.
Enfoque sostenible: la falta de restricciones extremas hace que esta dieta sea más sostenible en comparación con dietas muy restrictivas. Esto puede fomentar hábitos alimenticios más saludables a largo plazo, ya que es menos probable que genere sentimientos de privación o frustración.
¿Cuáles son los alimentos permitidos?
Aquí hay una lista de ejemplos de alimentos permitidos para cada grupo dentro de la dieta 80/20:
Cereales integrales: incluye alimentos como avena, pan integral, pasta integral, arroz integral y quinoa, que son fuentes ricas en fibra y nutrientes esenciales.
Verduras (cocidas al vapor, a la plancha, asadas): se recomienda consumir una variedad de verduras de hoja verde, así como calabaza, pimientos, tomates, judías edamame, patatas, maíz fresco y guisantes.
Frutas frescas: opta por frutas frescas como manzanas, paltas, bananas, frutos rojos, duraznos, peras y melones, que son excelentes fuentes de vitaminas y antioxidantes.
Proteínas magras (sin piel, cortes magros): incluye carne de vacuno magra, pollo, pescado, cerdo y pavo. Estas son buenas fuentes de proteínas sin agregar demasiada grasa.
Lácteos (buena fuente de calcio): selecciona opciones bajas en grasa como yogur, leche o alternativas a la leche, y requesón, para obtener calcio y otros nutrientes importantes.
Frutos secos y semillas (sin sal): puedes incluir almendras, castaña de cajú, semillas de chía, mantequilla de maní y nueces como fuentes de grasas saludables y proteínas.
Esta variedad de alimentos te permite mantener una alimentación equilibrada y nutritiva la mayor parte del tiempo, mientras te da la flexibilidad para disfrutar ocasionalmente de otros alimentos menos saludables dentro de tu plan alimenticio.