En una gran manifestación que congregó a 450 integrantes de la Organización de Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica (ANUEE), se alzaron voces exigiendo un precio justo en el consumo de electricidad.
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El grito de protesta resonó en las principales vialidades de la autopista México-Querétaro, específicamente en los carriles laterales y centrales, a la altura del pueblo de Tepalcapa, en el municipio de Cuautiltlán Izcalli, zona estratégica para quienes transitan hacia el segundo piso de esta vital arteria de comunicación rumbo a la Ciudad de México.
La manifestación, que sorprendió a conductores y transeúntes por igual, se convirtió en un acto de presión palpable. Los manifestantes, muchos de los cuales eran ex trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), informaron autoridades municipales.
Los quejosos dejaron claro su descontento frente a las tarifas eléctricas, a las que consideran injustas y poco accesibles para el ciudadano común, además buscan la reinserción laboral en la CFE, por lo cual no se moverán hasta que sean atendidos.
Afectación regional
La afectación vial resultante de esta protesta es notable, con una acumulación de vehículos de carga pesada que se extendió hasta los límites de la caseta del municipio de Tepotzotlán. El tráfico se tornó un verdadero reto para quienes necesitaban transitar por esa parte de la autopista, generando un considerable caos en los municipios vecinos como Tepotzotlán, Cuautitlán, Tultitlán, Huehuetoca y Teoloyucan.
La situación hizo que las autoridades recomendaran a los conductores el uso de vías alternas, como la carretera vieja Cuautitlán-Tlalnepantla, como una opción para llegar a la Ciudad de México sin mayores obstáculos, aunque también presenta carga pesada.
Esta manifestación de la ANUEE no solo puso de manifiesto la frustración de los ciudadanos por los altos costos de la electricidad, sino que también subrayó la necesidad de un diálogo urgente entre el gobierno federal y los usuarios de energía eléctrica.
Los manifestantes enfatizaron que su lucha continuará hasta que sus demandas sean atendidas por parte de las autoridades, con la esperanza de que sus acciones sean escuchadas y que se logren cambios significativos en el sistema eléctrico del país.
En el lugar ya hay policías municipales y personal del ayuntamiento, tratando de negociar con los manifestantes, en espera que se pueda abrir una de las vialidades más importantes para entrar a la capital mexicana.
